¿Qué es?
La Neurofisioterapia es una disciplina estudia los efectos que una lesión, daño o funcionamiento anómalo en las estructuras del sistema nervioso central o periférico causa sobre el movimiento de las personas (incluyendo los procesos de integración perceptiva y cognitiva, psicomotrices, la postura y las capacidades físicas básicas o avanzadas, como velocidad, resistencia, fuerza y tono muscular, amplitud de movimiento, equilibrio, coordinación…).
¿Qué tratamos?
Los trastornos del movimiento provocados por: traumatismos craneoencefálicos, ictus, tumores cerebrales, lesiones de nervios periféricos, enfermedades neurodegenerativas (como, por ejemplo, enfermedad de Alzheimer, Esclerosis Múltiple, Enfermedad de Parkinson, etc.), neuromusculares, enfermedades del desarrollo (como la Parálisis Cerebral) u otros procesos (enfermedades inflamatorias, infecciosas…).
En el campo de la fisioterapia, el papel fundamental es la evaluación de las alteraciones del movimiento y de la postura provocadas por el daño neurológico de una persona, con el fin de establecer un conjunto de medidas terapéuticas (basadas en agentes físicos) que disminuyan la disfunción, prevengan la discapacidad y eleven las capacidades potenciales de la persona afectada, preparándola para el desarrollo de actividades significativas para ella mediante el aumento de su potencial funcional.
FISIOTERAPIA PEDIÁTRICA
La fisioterapia neurológica infantil se ocupa de las alteraciones del niño en su capacidad de movimiento con el objetivo de obtener un desarrollo motor adecuado y pueda alcanzar la máxima independencia funcional.
La falta de adquisición de patrones motores, puede deberse a motivos muy variados : alteraciones a nivel del sistema nervioso central como retraso psicomotor, prematuridad, parálisis cerebral, espina bífida, parálisis braquial obstétrica u otros problemas a nivel del sistema nervioso periférico como patologías neuromusculares.
¿Cuándo un niño puede necesitar tratamiento fisioterapéutico?
Especialmente cuando exista un diagnóstico de daño neurológico pero también si crees que tu hijo/a puede tener alguna dificultad motórica: se retrasa en sostener la cabeza, mantenerse sentado, caminar, etc. En estos casos también es conveniente consultar con tu fisioterapeuta para obtener un diagnostico lo más precoz posible y conseguir mejores resultados.
¿Cómo?
Existen distintos enfoques para fomentar el desarrollo adecuado como el Concepto Bobath, Le Métayer, Vojta, Perfetti, Kabat… No existen estudios que demuestren la superioridad de ninguno de ellos sobre los demás. Es interesante ir conociéndolos y ver cómo puede enriquecer el tratamiento cada uno de ellos.
Pero recuerda, cada niño tiene un proceso madurativo propio, hay niños que tardan más en andar, otros que no gatean o que gatean muy poco, y no por eso tienen porqué presentar un proceso patológico. Ante cualquier duda, ¡pregúntanos!.
Áreas de trabajo :
Fisioterapia Neurológica y Traumatológica.
Recuperación Post-COVID.
Desde Neuronax entendemos que en muchas ocasiones no es posible el traslado del paciente a un centro clínico, por ello intentamos facilitar esta intervención en el propio domicilio.
Fisioterapia en casa
¿A quién va dirigida?
Podemos distinguir 2 momentos diferentes en los que un fisioterapeuta a domicilio puede y debe intervenir:
Por una parte, en un proceso agudo o una situación determinada como una enfermedad donde la mejoría requiere de técnicas de Fisioterapia.
Por otra parte, la fisioterapia en casa se presenta esencial cuando disminuyen las capacidades funcionales de la persona debido, casi siempre, a la suma de varios factores o disfunciones del organismo. Entonces, el individuo cae en una pérdida progresiva y real de sus posibilidades.
En los dos casos, se trata de prevenir, mejorar o paliar las alteraciones de las capacidades motrices de la persona mayor.
Grupos para los que va dirigida la fisioterapia en casa:
- Personas mayores que presentan alteraciones de la marcha y pérdidas del equilibrio.
- Personas con síndrome post-caída (ansiedad y miedo a padecer una nueva caída y pérdida de movilidad)
- Pacientes que vuelven a casa tras un ingreso hospitalario de media o larga duración.
- Individuos que necesitan rehabilitación bien sea por problemas traumatológicos, artrosis, fracturas, prótesis de cadera o rodilla…
- Enfermos con daños neurológicos: Daño Cerebral (ACV,TCE, tumores), Esclerosis Múltiple, Lesión Medular, Parkinson, enfermedades neuromusculares…
- Personas con afectación cognitiva: Depresión, Alzheimer y otras demencias.
- Pacientes con daño pulmonar y problemas respiratorios.
- Personas con problemas vasculares, amputaciones y prótesis de miembro inferior.
- Pacientes en cama.
- Personas con dolores crónicos.